Armored Warriors es un arcade realizado y publicado por Capcom en 1994. Es un beat 'em up que nos permite ponernos al mando de cuatro robots gigantes que deberán combatir las hordas enemiga. Cada uno de ellos tiene unas características diferentes y confieso que mi debilidad por el color amarillo siempre me llevó a seleccionar la unidad FORDY, el robot más rápido de todos. Lo manejaba la única mujer del plantel, la teniente Sarah White llamada “Siren” en la pantalla de selección.

Como los enemigos a los que nos enfrentamos son robots gigantes, pues podemos coger las partes de su cuerpo que salgan desprendidas al eliminarlos e implantarlas a nuestro cuerpo metálico. Esto hace que nos convirtamos en una suerte de cacharreros andantes para confeccionar la máquina que más nos convenga. Y no solo estamos hablando de convertir nuestros brazos mecánicos en armas de destrucción sino que también podemos coger las piernas, o la pieza mecánica con la que se desplacen, de los enormes cachivaches.

Armored Warriors luce genial aún hoy en día. Todo fruto de esa maravilla llamada CP System II, una placa que ha repartido mucho amor en forma de excelsos videojuegos. Una infinidad de explosiones se van sucediendo sin que la recreativa tiemble y eso es obra de la placa de Capcom.

100% recomendado, es un juego que merece estar entre los mejores de su género.